CONTEXTO HISTORICO


II GUERRA MUNDIAL


Período Posguerra
Entre 1919 y 1922, Italia vivió una etapa de problemas sociales y políticos, inflación y conflictos económicos que se agravaron por la creencia de que Italia había ganado la guerra pero había perdido la paz.El 24 de octubre de 1922, el líder del movimiento fascista, Benito Mussolini, que contaba con el apoyo de los conservadores y de antiguos militares, pidió que la formación del gobierno le fuera encargada a su partido, e incluso amenazó con tomar el poder por la fuerza si su propuesta era rechazada. Los fascistas organizaron la denominada 'Marcha sobre Roma' que acabó con la dimisión del primer ministro, Luigi Facta. El 28 de octubre de ese año, el rey Víctor Manuel III le encargó a Mussolini la formación de un nuevo gobierno.

La Dictadura Fascista
Aunque Mussolini fue investido de amplias prerrogativas de gobierno con objeto de restaurar el orden en el país, al principio gobernó dentro de los márgenes constitucionales.
Poco a poco Mussolini creó un Estado totalitario en el que el Parlamento carecía de poderes. Además, se declaró responsable de sus actos sólo ante el rey y obligó al Parlamento a que reconociera su autoridad para aprobar decretos con rango de ley. También estableció la censura de los medios de comunicación y en 1926 suprimió los partidos de la oposición.
La relación con Alemania
El nombramiento en 1933 de Adolf Hitler como canciller de Alemania fue recibida con cautela por la censurada prensa Italiana. Hitler, en cambio, manifestó su simpatía hacia el fascismo Italiano. No obstante el eje Germano-Italiano no se formó inmediatamente, y las relaciones entre Francia e Italia incluso mejoró durante cierto tiempo.
El eje Roma-Berlín
La cooperación entre Italia y Alemania empezó a dar sus frutos en 1937. Después de la visita de Mussolini a Alemania, en septiembre, Italia anunció su adhesión al Pacto Anti-Komintern que habían suscrito Alemania y Japón, y poco después abandonó la Sociedad de Naciones.
En mayo de 1939 firmaron un pacto de ayuda militar, cuyas consecuencias más inmediatas fue la anexión de Bohemia y Moravia por parte de Alemania y la de Albania por parte de Italia.

La II Guerra Mundial
Cuando en septiembre de 1939 comenzó la II Guerra Mundial, Mussolini dejó claro que él no estaba obligado a ayudar militarmente a Alemania, ya que anteriormente había dejado muy claro a los nazis que Italia no estaría preparada para la guerra hasta 1942.

La entrada en la guerra
Los éxitos de Alemania durante el primer año del conflicto, hicieron que Mussolini cambiara su política.
La derrota en Grecia, a la que le siguieron las victorias británicas en el Mediterráneo y Egipto, hizo tambalearse los cimientos del régimen fascista. Mussolini se vio obligado a pedirle ayuda a Hitler, con lo que a partir de entonces la influencia alemana fue cada vez mayor en todos los campos de la política italiana. Los grandes cambios realizados en la cúpula militar italiana y otras reformas puestas en práctica no lograron devolver la moral al pueblo italiano.

La entrada de EEUU a la guerra
Al tiempo que sucedían estos hechos, las relaciones entre Estados Unidos e Italia se deterioraban progresivamente. La alineación de países alcanzó su punto de máxima tensión en diciembre, cuando Mussolini, tras el ataque japonés a Pearl Harbor, declaró la guerra a Estados Unidos.

La invasión de Italia
El 10 de julio de 1943, tras la capitulación de la isla italiana de Pantelleria, lugar de gran importancia estratégica en la zona del Mediterráneo, el ejército aliado invadió Sicilia. Seis días después, el presidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt y el primer ministro británico Winston Churchill se dirigieron a través de un mensaje por radio al pueblo italiano pidiendo su inmediata rendición para evitar mayores devastaciones
Tras un duro debate, el Consejo retiró su confianza a Mussolini. El 25 de julio, el rey Víctor Manuel III solicitó su dimisión y lo puso bajo arresto militar. Además, le encargó al mariscal Pietro Badoglio la formación de un nuevo gobierno, cuyas primeras medidas fueron decretar la completa abolición de las organizaciones fascistas en Italia.

La lucha por Italia
El anuncio del armisticio por parte de Italia desencadenó una trepidante carrera entre aliados y alemanes para hacerse con los territorios, bases, armas, suministros, comunicaciones y demás material anteriormente bajo control italiano.
El rey Abdica
En Abril de 1944 Víctor Manuel III anunció su decisión de retirarse de la vida pública y nombró a su hijo Humberto, más tarde Humberto II, teniente general del Reino, nombramiento que sería efectivo cuando las tropas aliadas entrasen en Roma.